La Semana de la Moda de París ha sido testigo de la última provocación de Kim Kardashian. No conforme con teñirse el pelo de rubio platino, la esposa de Kanye West se presentó en el desfile de Balmain con un atrevido vestido que transparentaba sus pezones.

Kim Kardashian, a quien vimos en Londres con un explosivo look de látex, no para. La celebrity más mediática del planeta sigue acaparando todos los flashes allá por donde pisa. En esta ocasión, las calles de París han sido el lugar escogido por la protagonista del reality ‘Keeping Up with the Kardashians’ para desembarcar junto a su esposo Kanye West y mostrar su última extravagancia. La estrella televisiva fue retratada por los paparazzi a la salida del hotel parisino Le Royal Monceau de la mano del rapero y exhibiendo un radical cambio de look en su melena. Kim ha abandonado el negro azabache que durante tanto tiempo ha lucido para dar paso a un rubio platino que ha generado un aluvión de comentarios entre sus seguidores de Instagram.